ABRAZAR LOS ÁRBOLES CON CONSCIENCIA

(Organizamos talleres contacta con nosotros)

 

La BIOFILIA es la afinidad de las personas con la Naturaleza. Es un instinto natural y nos acercamos a ella porque hay una relación integrativa, de interrelación  entre los árboles y las plantas con el grupo humano, con la persona. El Shiri- Yoku  es una terapia milenaria  es el BAÑOS DE BOSQUE, sobre todo practicada en Japón y zonas asiáticas.

Un encuentro de ABRAZAR LOS ÁRBOLES es una experiencia ecológica y energética que hacemos en PLENA CONSCIENCIA.

La respiración serena, pausada y consciente nos permite vivir esta experiencia con más profundidad, porque lo que más nos relaciona con los árboles es el OXÍGENO. Emitimos CO2 Dióxido de carbono que la natura absorbe y nos regala con un oxígeno limpio, potente y en él van pequeñas partículas de árboles y plantas que pasan a formar parte de nuestro ser.

Viviremos la experiencia a partir de los sentidos en concreto el tacto y la vista.

Con el tacto notaremos las formas que nos regala en su tronco o en sus ramas y hojas. Lo viviremos en PLENA CONSCIENCIA. De esta forma activaremos el chacra de las manos con el que la integración de vibraciones entre el aura del árbol y el nuestro será potente y podemos llegar a percibirlo desde la ATENCIÓN PLENA. ( activar la vista en posición fetal cada noche).

Con el sentido de la vista será poner en práctica la atención, la observación y la visualización. Despertaremos y activaremos nuestra glándula Pineal. Cerrando los ojos MIRAREMOS, practicaremos la MIRADA INTERIOR. Buscaremos las formas el movimiento, los diversos tonos, colores…que podamos captar. (ejercicio potente para activar la intuición y la memoria.

Iniciamos el proceso activando la Energía de nuestras manos Pies separados, manos activas, cuerpo recto, erguido como un árbol. Vamos observando el árbol que tenemos delante y nos identificamos con él con su extensa aura, respirando y recibiendo el oxígeno que nos está regalando en este preciso momento. Friccionamos y activamos las manos, tocamos el chacra en el centro de la mano, lo activamos ( las 2 manos). Unimos las puntas de los dedos, conscientes que estamos uniendo los dos cerebros que en realidad tenemos. Con esta acción  vamos incidiendo en todo nuestro cuerpo y sobre todo activamos la Pineal. Respiración profunda lenta y serena.

Buscaremos nuestro árbol y caminaremos lentamente hacia él sintiendo un gran respeto por ese ser que desde hace miles de años se ha ido preparando y está esperando este encuentro, el que cada una de nosotras hacemos hoy.

-          El primer contacto es con el sentido de la vista es un encuentro de amigos, dejemos fluir la sonrisa, los sentimientos… nos acercamos dejando una distancia de unos 3 o 4 pasos, aún no lo abrazamos ni tocamos. Nos identificamos en que somos 2 seres erectos, energéticos y naturaleza pura, nuestra cabeza y la parte superior de la copa el tronco y nuestra columna vertebral sus raíces y nuestros pies. Visualizamos el proceso de descargar hacia la tierra y recargamos a través de un circuito que se inicia en los pies, sube por la columna pasa por todos los chacras llegando al 8º chacra donde el circuito va al chacra superior del árbol bajando por todo el tronco y columna central hasta llegar a las raíces, la tierra y cerrando el circuito en nuestros pies. Realizamos el proceso  3 veces, con serenidad, tranquilidad y consciencia, sabiendo que estamos descargando y recargando.

 

-          Nos acercamos al árbol, primero el contacto con las manos. El tacto consciente sus formas y texturas,  después lo abrazamos como nos venga mejor. En silencio lo notamos nos identificamos con él podemos identificar alguna parte de nuestro cuerpo que necesita más atención y podemos realizar un acto terapéutico, sanador, energético porque estamos delante de la Sabiduría por excelencia, el árbol. Siempre acompañando con la respiración lenta y en plena consciencia. Es una respiración vegetal. El árbol forma parte del ecosistema y nosotros también. Formamos todos una comunidad.

 

-           Al abrazar un árbol estamos abrazando todas sus bondades terapéuticas.

 

-           Nos suministran el Oxígeno. Equilibran el proceso de inspiración espiración, la resonancia electro-magnética del planeta, nos proveen vibraciones energéticas increíbles. Canaliza la Energía del sol a través de la fotosíntesis y nos la transmiten también en la alimentación de productos cultivados en forma natural si es en casa mejor.

 

Vivencia a través de la vista y la glándula Pineal.

Observación del árbol, nos acercamos lentamente colocamos la frente en su tronco y lo abrazamos. Disfrutemos este encuentro mágico, observamos formas, colores movimiento estamos impulsando el despertar de nuestra glándula de la Intuición, nuestro tercer ojo. Podemos practicar este ejercicio al largo de los días  y observar cómo se va abriendo nuestra intuición, nuestra atención y capacidad pensante.

Hacemos un acto de agradecimiento a este ser extraordinario, gran sabio que muchas veces maltratamos y no respetamos los humanos.

Volvemos a tomar consciencia de nuestra respiración, vamos relajando los brazos y nos despedimos de él pero sabiendo que en todo el oxígeno que vamos respirando siempre habrá una parte y colaboración de este árbol, porque todos están conectados.

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